MADRID
El presidente del Partido Popular en Andalucía y candidato a presidir dicha región, Juanma Moreno, manifestó su voluntad de mantener una "relación fluida" que le permita llegar a acuerdos con el partido ultraderechista Vox, que irrumpió con fuerza en las elecciones autonómicas andaluzas.
"Tenemos visiones distintas, pero todos estamos capacitados para encontrarnos en un punto de encuentro", dijo Moreno en una entrevista con la Cadena COPE.
Moreno anunció su intención de presentarse a la investidura para presidir la Junta de Andalucía y manifestó su intención de tener una relación "fluida y sincera" para obtener el apoyo de Vox en esa empresa.
En las elecciones andaluzas celebradas el 2 de diciembre, el Partido Popular fue la segunda fuerza más votada con el 20% de votos, lo que le otorga 26 escaños en el Parlamento autonómico.
El partido más votado fue el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que consiguió el 27.9% de los votos (33 escaños).
Pese a ello, la aritmética parlamentaria hace que los socialistas tengan complicada la formación de Gobierno, ya que su principal socio potencial, la coalición de izquierdas Adelante Andalucía —formada entre Podemos e Izquierda Unida— consiguió únicamente el 16% de los votos, obteniendo 17 escaños, lo que no permite que la suma de ambos partidos llegue a la mayoría absoluta de 55 escaños.
Sin embargo, sí parece plausible un pacto entre los conservadores del PP, los liberales de Ciudadanos (que consiguió el 18% de votos, obteniendo 21 escaños) y el partido ultraderechista Vox, que entró por primera vez a un parlamento español tras conseguir 12 escaños con el 11% de los votos totales.
Preguntado sobre los riesgos con una posible alianza con Vox, el líder del Partido Popular en Andalucía afirmó que esa opción no debería ser objeto de reproches porque "todos los partidos son legítimamente democráticos" y "cumplen con los principios constitucionales".
Por último, Moreno afirmó que los resultados en Andalucía no son una respuesta a la gestión del anterior Gobierno socialista en la región, sino que también son un gesto de "estrepitoso rechazo" hacia la gestión del actual presidente del Gobierno central, el también socialista Pedro Sánchez.