SANTA CRUZ DE TENERIFE/ La Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias ha lanzado una ambiciosa campaña para promover las islas como un destino turístico respetuoso con el medio ambiente. Bajo el lema "Islas no aptas para todos los públicos", la iniciativa busca atraer a turistas que valoren y respeten la naturaleza. La campaña se inició con el despliegue de una gran lona en la Puerta del Sol de Madrid, que mostraba una imagen de Canarias pixelada, simbolizando la necesidad de preservar la belleza natural del archipiélago.
Sin embargo, esta promoción de un turismo sostenible contrasta fuertemente con algunas de las recientes decisiones del Gobierno de Canarias en materia de desarrollo urbanístico. Proyectos como la macro urbanización Cuna del Alma en Adeje y el Hotel de La Tejita han generado una gran polémica debido a su impacto ambiental y la destrucción de áreas naturales valiosas.
La macro urbanización Cuna del Alma, ubicada en El Puertito de Adeje, ha sido particularmente controvertida. El proyecto ha enfrentado resistencia de activistas medioambientales y de comunidades locales preocupadas por la conservación de su entorno. En el pasado, la Dirección General de Patrimonio Histórico del Gobierno de Canarias, bajo la dirección de Nona Perera de Podemos, había logrado paralizar las obras e imponer una sanción de 100.000 euros a la constructora por daños a grabados rupestres de los antiguos aborígenes de la isla. No obstante, el actual Gobierno de Canarias, formado por Coalición Canaria y el Partido Popular, ha levantado la sanción y permitido la reanudación de las obras.
El Hotel de La Tejita, otro proyecto criticado, ha suscitado inquietudes similares. Los opositores argumentan que la construcción del hotel amenaza una de las playas más emblemáticas de Tenerife, conocida por su valor ecológico y su belleza natural.
La campaña "Islas no aptas para todos los públicos" busca posicionar a Canarias como un destino para turistas conscientes y responsables, que deseen disfrutar de la naturaleza sin dañarla. No obstante, las acciones gubernamentales en relación con estos proyectos urbanísticos sugieren una contradicción entre la promoción de la sostenibilidad y las políticas de desarrollo territorial.
La lona desplegada en la Puerta del Sol es un intento audaz de captar la atención y generar interés por un tipo de turismo más responsable. Sin embargo, para que esta campaña tenga credibilidad y éxito a largo plazo, es fundamental que las políticas gubernamentales estén alineadas con los principios de conservación y respeto ambiental que se promueven.
En conclusión, aunque la campaña de la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias tiene un mensaje positivo y necesario, las acciones y decisiones respecto a proyectos urbanísticos como Cuna del Alma y el Hotel de La Tejita ponen en entredicho el compromiso real del gobierno con la sostenibilidad.